Quito, 21 de febrero del 2006
Sr. Dr.
Fiscal Penal Distrital de Pichincha
Nosotros: MAXIMILIANO MORENO HIDALGO con cédula de identidad 171144346-1, de profesión Médico, residente en Quito, en la Av. Amazonas 21 217 y Roca que me desenvuelvo como presidente de la Fundación de Voluntariado Ecotrackers (al servicio de comunidades para frenar la destrucción de la naturaleza y elevar el nivel de vida de sus habitantes) y miembro como fundación. del conglomerado llamado AFACC Alianza por un Futuro Ambiental Contra la Corrupción; y JUAN CARLOS PADILLA VILLACÍS con cédula de identidad 171104346-1, radicado en la ciudad de Quito Barrio El Rosario, calle Río Putumayo N60-48 y Av. Del Maestro de profesión constructor, Presidente de la Auto-convocada por recomendación de la CCCC Veeduría Ciudadana para el control de la tala ilegal de madera, y miembro también de AFACC; denunciamos:
A los señores WILFRIDO CARREÑO y JACINTO MUÑOZ, manabitas, Residentes en el sector del Mango y Boca del Tigua, traficantes de madera ambos, el primero propietario de un trailer freigthliner cuyo cabezal es negro con amarillo de placas GIR-831, por los delitos de: INTENTO DE ASESINATO, AMENAZAS CON ARMA DE FUEGO, TIROS AL AIRE Y ARMAS CORTOPUNZANTES, ASALTO, ROBO E INTIMIDACIÒN, todo realizado con premeditación alevosía y ventaja. Estos delitos fueron cometidos en la provincia de Esmeraldas pero por la amenaza que estos sujetos y sus cuatro acompañantes hicieron sobre nuestras vidas nos vemos imposibilitados de ingresar a aquella provincia.
Debido a la naturaleza de nuestra labor en la citada AFACC y veeduría, coordinando nuestra acción con la Fiscalía de Delitos Ambientales la Policía Ambiental, la de Esmeraldas, el Sr. Gobernador de la citada provincia y los medios de comunicación; realizamos un viaje a la misma en busca de frenar las irregularidades cometidas por parte de los madereros de la zona y autoridades forestales, las encontramos como quedó registrado en las filmaciones realizadas por los camarógrafos de el programa La Televisión y del Diario La Hora, cuando encontramos el citado trailer escondido bajo el puente del Río Cojimíes en el sector denominado EL MANGO, DENTRO DE LA RESERVA ECOLÓGICA MACHE CHINDUL. Este lugar es un santuario y el vehículo debió haber sido capturado junto con los aproximadamente 200 m3 de madera que lo acompañaban, pese a ello se dejó libre al mismo.
Al día siguiente con autorización del Sr. Gobernador se realizó la detención del Trailer mientras transitaba en el sector de Puerto Nuevo y la retención de la guía forestal –adulterada- que lo autorizaba a circular, ante la posibilidad de perder la madera los acusados fugaron con el trailer y la madera, el policía encargado del operativo Wilson Quiñónez, nos abandonó dejándonos a merced de los traficantes; ellos al vernos rodeados por la comunidad nos mostraron sus armas de fuego y ante nuestro intento de fotografiarlos huyeron.
El día 19 de febrero, cuando intentábamos ir a Esmeraldas el camino se hallaba bloqueado por derrumbes, por ello nos dirigimos a Chamanga en un bus de la Flota Manabita de placas MAP-052 conducido por el Sr. Ángel Agustín Muñoz con C. I. 130897046-4 y el Sr. José Francisco Muñoz Solórzano con C. I. 130471011-2 quienes son testigos de los hechos sucedidos. Mientras transitábamos cerca de Chamanga en el sector denominado la “Y” fue interceptado el bus lleno de pasajeros por otro vehículo, mientras otros individuos disparaban en la carretera los acusados subieron faltándonos de palabra y obra y junto con dos secuaces más trataron de obligarnos a bajar del bus, ante nuestra radical oposición nos exigieron la guía, se la dimos, junto con nuestras denuncias al Fiscal Ambiental y a la Policía, nos tomaron fotos, anotaron nuestros números de cédula y robaron la memoria de la cámara digital que llevábamos, cuando bajaban del bus finalmente nos amenazaron de muerte.
La guía de movilización que llevábamos constituía una prueba de excepción de la corrupción del regente forestal de la zona, del administrador de la Reserva Machi Chindul y de los transportistas, no pudimos dejarla al policía citado líneas atrás puesto que el mismo nos abandonó a manos de estos individuos y luego supimos de una fuente confidencial que nos denunció como si fuéramos del Ministerio del Ambiente ante los madereros de la zona por lo que puso en peligro nuestras vidas al ponerse de parte de los criminales, cuando su comisión era garantizar nuestra integridad.
Por los hechos citados hacemos responsables de nuestra integridad, la de nuestras familias, la de las personas de la zona que aparecen en las fotos de la cámara cuya memoria fue sustraída a estos individuos acusados. Así también los responsabilizamos por cualquier mal uso que se haga con nuestra firma o número de cédula puesto que ambas cosas nos fueron sustraídas, rogamos el inicio de las investigaciones que conduzcan a la recuperación de nuestros bienes y se nos ofrezca garantías sobre nuestra vida y la de nuestros allegados.
MAXIMILIANO MORENO HIDALGO JUAN CARLOS PADILLA VILLACÍS
C.I. 171144346-1 C.I. 171104346-1